El School Team de Monlau Repsol dio un importante paso hacia el título en el circuito de Navarra gracias a la cuarta victoria de la temporada de Brian Uriarte, más líder todavía tras el abandono de su más inmediato perseguidor, al que ahora saca 39 puntos de ventaja. El triunfo deja al piloto cántabro a las puertas del título: le bastará con sumar 11 puntos en las dos carreras de Jerez para asegurarse el campeonato.
Mucho tuvo que ver en la victoria la mala fortuna de su compañero de equipo, Pol Solà, que llegó a la vuelta final con serias opciones de ganar y se fue al suelo en la salida de la última curva. Con él se llevó por delante también a Alex Longarela y finalmente ganó Uriarte, que era quien lideraba el grupo perseguidor. “Ha sido una lástima porque el triunfo de Pol hubiera significado que teníamos a nuestros dos pilotos en primera y segunda posición de la general”, se lamentaba el Team Manager, Kev Coghlan.
Ni las previsiones más optimistas hacían presagiar que el School Team llegaría a Jerez con una ventaja tan importante de puntos. El fin de semana arrancaba con un entrenamiento cronometrado que dejaba claro que el segundo clasificado en la general, Máximo Martínez, no pondría las cosas fáciles, tras conseguir la pole position. Pol Solà fue el piloto de Monlau Repsol que más se le acercó en la tanda clasificatoria, a algo más de ocho décimas. Brian Uriarte, con más problemas de lo habitual, logró acabar sexto (+1.586) y Gonzalo Pérez, que sufrió una caída en su tercera vuelta, decimosexto (+3.596).
En la carrera del domingo, la única de todo el fin de semana, se formó tras la salida un grupo de tres pilotos con Máximo Martínez, Pol Solà y Alex Longarela, y un segundo grupo perseguidor que encabezaba, a ratos, el líder del campeonato, Brian Uriarte. El cántabro hizo una carrera inteligente y no dejó que los nervios se apoderaran de él a pesar de no poder seguir el ritmo de cabeza. Alternando entre la cuarta y la quinta posición, esperaba acontecimientos.
A tres vueltas para el final se produjo el primer movimiento y muy decisivo para el campeonato. El rival de Brian en la general, Máximo Martínez, era penalizado con una long lap penalty por excederse reiteradamente de los límites de la pista, y poco después abandonaba por problemas mecánicos.
Con el KO de Máximo, la lucha por el triunfo se reducía a dos pilotos, Pol Solà y Alex Longarela, que se emplazaron al todo por el todo en la última vuelta. Pero la mala suerte volvió a cebarse con Pol, que en la salida de la última curva, al tratar de defender la trazada, abrió gas demasiado pronto y salió despedido por orejas. En el incidente también se llevó por delante a su contrincante. Así fue como Brian, aprovechando su constancia, se adjudicó el decisivo triunfo en Navarra.
“Pol está trabajando muy bien toda la temporada, pero realmente no está teniendo suerte. Tenía ritmo para ganar, ha estado cerca de la victoria varias veces, pero este año se le resiste”, reconoce Kev Coghlan. El Team Manager del equipo, en cualquier caso, saca hierro al asunto y rescata la lectura positiva del fin de semana: “Parecía que nos íbamos a Jerez con 5-6 puntos de ventaja y nos vamos con 39”, destaca.
En cuanto a Gonzalo Pérez, de nuevo volvió a demostrar su gran progresión, aunque en este caso no pudo lucir tanto como en otras ocasiones. Le lastró el decimosexto puesto del entrenamiento cronometrado, donde apenas tuvo tiempo de rodar. “Arrancó con precaución desde la decimosexta posición, pero a partir de la tercera o cuarta vuelta llevó un ritmo muy parecido al de Brian”. El piloto, debutante este año en el School Team, finalizó sexto.
El jefe de filas del School Team, Kev Coghlan, hace un balance positivo del trabajo de su equipo a lo largo del fin de semana: “Están trabajando muy bien, y es muy importante seguir así. De cara a Jerez tenemos que estar muy centrados en el apartado mecánico para no sufrir en este aspecto durante las carreras. Si Brian acaba ambas tenemos mucho ganado”. El desenlace lo conoceremos en dos semanas, el 7 y 8 de noviembre.
